pues como dice el título "Soria ni te la imaginas", es verdad que esta pequeña capital de provincia con alrededor de 40.200 habitantes te sorprende con la cantidad de edificios tanto religiosos como civiles que existen en la ciudad. Una de las cosas que también te sorprende,aunque uno ya vaya con esa idea, es el frío que hace a la ribera del Duero pero con buena ropa y paseando por la ciudad lo puedes aplacar un poco.
Soria es una ciudad que se puede visitar perfectamente en un fin de semana por lo que se puede realizar alguna excursión como la que hicimos a las ruinas de Numancia. Estas se encuentran situadas a unos 5 km de la capital de provincia en la localidad de Garray que también es muy pintoresca. La entrada tiene un coste de 0.60 céntimos(Lunes-Viernes), ese es el precio aunque los sábados es gratis y hay visitas guiadas que llegan a costar 4 euros por persona. Nosotros las visitamos sin guía y merece la pena verlas la verdad.
De Soria destacaría la Ermita de San Saturio que se encuentra junto al Duero, excavada en la roca y para llegar existe un bonito paseo junto al río. En la ciudad se puede respirar la poesía ya que a cada paso encuentras referencias a Gustavo Adolfo Bécquer, Gerardo Diego y Antonio Machado (Olmo seco) por destacar a algunos.
El tapeo es obligatorio y puedes encontrar varios bares alrededor de la plaza conocida como "La plaza de Herradores". Allí mismo nos alojamos en el Hotel Apolonía que os lo recomiendo por ser una hotel de nueva construcción, moderno, un buen trato del personal y una situación inmejorable.
Resumiendo, Soria es una ciudad con su propio encanto pero os recomiendo ir cuando haga menos frío, no como nosotros que la hemos visitado en pleno Enero jajaja.
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Ermita de San Saturio |
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